jueves, 1 de enero de 2009

Crónica San Silvestre 2008

15:30 La escuadrilla silvestrera, compuesta por los atletas (mi hermano y un servidor), y los fans incondicionales (representados por mi padre y mi sobrina Tania de 5 añitos) dejan el hogar rumbo al acontecimiento deportivo más grande del año. El medio de transporte escogido: el metro.
16:30 Asomamos a las inmediaciones del Bernabeu, y ya empezamos a impregnarnos del ambiente de la prueba. Vemos los primeros disfraces y aprovechamos para pasar por el stand de Powerade ya que apenas hay cola.

Damos un paseo alrededor del Bernabeu de paso que nos vamos dirigiendo hacia los cajones de salida. Nos encontramos por el camino a los atletas de San Sebastián de los Reyes, y posteriormente a Chema, ganador de la carrera del distrito 5 de Algete el pasado sábado (En la que mi hermano firmó el 3er puesto, y yo el 4º)

17:20 Accedemos a los cajones de salida, la gente calienta en los tradicionales rondos circulares y comienzan a estirar los músculos. Mi sobrina Tania termina de comerse su madalena (Muffin de chocolate que tenía una pinta salvaje y era más grande que ella, jeje). Comenzamos a estirar.

17:30 La hora de la verdad, una vez concluídos los ejercicios de estiramiento, nos despojamos de nuestras prendas de abrigo, que entregamos a nuestro ropero particular, nuestro padre (última vez que lo hacemos, ya que pudimos comprobar con posterioridad que el ropero de Nike funciona a la perfección), y sin calentar nos dirigimos a nuestro cajón de salida, intentando evitar las aglomeraciones de última hora.

18:00 Los minutos previos a la salida perdurarán en mi memoria mucho tiempo como una de las sensaciones más bonitas y emocionantes que he vivido. Cuando faltaban diez minutos para el pistoletazo comienza el típico lanzamiento de camisetas viejas al aire (las llevan muchos corredores para abrigarse hasta el último momento antes de cada carrera, una vez cometida su función, las tiran ), pero por el ambiente festivo comienza una guerra de lanzamiento de ropa entre todos los corredores apelotonados.
Dos minutos antes de la salida, en el escenario comienzan a tocar "white christmas" a ritmo de rock, mi pulsómetro marca 120 ppm y no he dado un paso, tengo los pelos de punta y un nudo en la garganta.
Pistoletazo de salida, la música se acelera, casi a ritmo ska y la marea verde comienza a inundar la subida inicial de Concha Espina. Muy poco a poco el pelotón comienza a moverse, y a nuestro paso por la alfombra de salida, apenas vamos andando.
Mi hermano decide disfrutar la carrera, y se lleva su cámara de fotos, que irá utilizando a lo largo del trayecto para inmortalizar el ambiente, los disfraces, etc. Yo intentaré darlo todo, pero tras el primer kilómetro y medio, en el que hemos perdido mucho tiempo por la aglomeración de gente, empiezo a ser consciente de que la mejora de mi marca personal (48:14) no será posible.
A partir del km 2 ya se puede correr, y lo aprovecho con demasiado énfasis, clavamos el km en 4 minutos (algo imposible de mantener, mi ritmo medio en carrera es de 4:50 y el de mi hermano 4:30). Aunque los kilómetros de bajada que restan los corremos a buen ritmo, los minutos perdidos en la salida y el desgaste por esa salida tan fuerte en el 2º kilómetro hacen que al llegar al ecuador de la carrera sea consciente de que no habrá mejora. El km 5 lo pasamos en poco menos de 25 minutos, y quedan las subidas de Vallecas...
A lo largo de todo el recorrido hay gente animando, la carrera discurre por las principales arterias de la capital, es de noche y las iluminación navideña luce majestuosa. Hay escenarios a lo largo del recorrido, alguos con música en directo, otros con pantallas gigantes de televisión siguiendo el desarrollo de la prueba. Es un día único, "estamos de suerte", como diría mi sobrina Tania.
Km 8 Llegada a Vallecas, cruzamos el puente y comienza la subida por la Avda de la Albufera, a la derecha queda la Avda del Monte Igueldo, ruta de peregrinación a nuestro querido Penedillo, pero no torcemos nuestro rumbo y no hubo por lo tanto, avituallamiento a base de bravas y calamares.
La subida es dura y continuada, todo un kilómetro de entrega, aquí ya no se puede uno reservar nada. Conseguimos que nuestro ritmo no decaiga en exceso por el esfuerzo. Adelantamos a muchos que lo intentaron también y no pudieron.
Oigo una voz que grita "Ray!!", mi amigo Marcos está viendo la carrera, me saluda y me da ánimos. Juraría haber visto a otro amigo a su lado, que luego resulta que no estaba allí. La mente cuando uno va a tope te hace ver lo que sea, jeje.
Último kilómetro, mi hermano frena, buscando entre el público a mi padre y mi sobrina, yo le digo que seguramente habrán ido derechos al punto de encuentro para darnos lo antes posible la ropa, me encuentro agusto y no bajo el ritmo. Pienso que mi hermano sigue pegado a mi chepa, haciendo fotos como en toda la carrera, y en los últimos metros me giro para entrar juntos a la meta, pero Ángel se ha quedado bastante atrás al ir buscando entre la gente a mi padre.
Resultado final 50:05, el tercer Raimundo de la San Silvestre, jeje, y el clasificado 5924 de 27.500, la experiencia inolvidable.
Me junto con Ángel, entregamos el chip, recogemos agua y un plátano y nos dirigimos al punto de encuentro donde inmediatamente nos reunimos con mi padre y con Tania. Tania se ha portado genial y ha aguantado todo el día de carrera como una campeona.

Cuesta pensar una forma mejor de despedir un año, sinceramente. Si estás leyendo estas líneas y no has corrido una San Silvestre, estás tardando en empezar a entrenar para participar en la de 2009, unos meses antes como mínimo, para poder disfrutarla como se merece.



P.d. No quisiera acabar sin dedicar un sentido pésame a la familia y allegados del corredor fallecido durante la San Slvestre. Lo que ha sido motivo de alegría e ilusión para tantos miles de personas se ha transformado en dolor y tragedia para unos pocos. Un fuerte abrazo para ellos.

4 comentarios:

  1. Enhorabuena por esa emocionante San Silvestre, creo que voy a hacerte caso para ese 2009... :)
    Un abrazo Ray!

    Por supuesto mi pésame, también, para esa familia que tuvo que vivir un día terrible.

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  2. Enhorabuena!!!! Me ha gustado mucho la crónica!! La verdad es q la echaba en falta!!! Me alegro q disfrutaras la carrera y que el 2009 te traiga muchas alegrías deportivas!!!!

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  3. Feliz año!! Me ha encantado la crónica de la carrera, me alegro que la disfrutaras, a mi me hubiera gustado correrla este año pero al final no pudo ser...seguiré tu consejo y me prepararé para el 2009.

    Mis mejores deseos para este año.

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